ROGELIO
SILVERO, el genio olvidado.
por: Aida Lara
Comunicadora
radial
(soloendomingo@hotmail.com)
Rogelio Antonio
Silvero Rivero. Nació en Caazapá el 14 de febrero de 1928. Fueron sus padres: Don Blas Silvero y Doña Antonia Rivero. Hizo la
escuela primaria en Villarrica, y posteriormente en Asunción, los tres primeros
cursos del bachillerato. Su formación literaria es prácticamente autodidacta,
habiéndose iniciado como periodista en el año 1954. También incursionó en la
poesía en su juventud, llegando a figurar entre los nuevos valores de la década
de 1950, disciplina ésta que abandonó para dedicarse de lleno al oficio de
escritor.
Sus obras
teatrales. Se inició en el drama con “Cañón 105”, a la que siguieron casi
ininterrumpidamente “Mercado 4”, “La Calandria de mi barrio” (zarzuela), “jagua
rekové”, “Se viene los nietos”, “Pychai”, “El veterinario”, “Ña Candelaria”,
“Casamiento mbaretépe”, “Comisión pro bolsillo”, “Pelota jara”, “Cháke oú zorro
gris”, “Entre dos roimé”, “Ñorairó rapykueré”, y muchas otras.
Su mayor éxito
fue “Jaguá rekové” (La vida del perro), escrita totalmente en guaraní. Es una obra que denuncia la condición humana, a través de la
dramática historia de un perro abandonado que en la escena adquiere una
dimensión humana. El crítico José Luís Appleyard, la calificó como la mejor
obra escrita en guaraní. Por su parte, “Karaí Francia”, aún no representada,
fue premiada en el concurso de obras teatrales organizado por Misión de Amistad
en el año 1980. En esta obra dramatiza aspectos de la vida del Supremo Dictador
Dr. José Gaspar Rodríguez de Francia, desde su paso por la Universidad de
Córdoba, hasta desembocar en los sucesos del 14 y 15 de Mayo de 1911. La obra
"Karaí Francia", fue llevada a las tablas por la Compañía de Roque
Sánchez.
El escritor Rogelio Silvero, se destacó
asimismo como libretista en el género radioteatral, muy de moda en nuestro país
en la década del 60 del siglo pasado, habiendo escrito aproximadamente más de
50 obras. La mayoría de estas obras tuvieron un resonante éxito, tales como
“Milagrosa crucesita de la fe”, “Tengo derecho a vivir”, “Lida Rosa”, “El pozo
de los milagros”, “Los hijos del dolor”, entre otros.
Son de la
producción de Rogelio Silvero las primeras telenovelas escritas en nuestro país
para el video-tape. “Magdalena de la calle”, basada en la obra teatral de Mario
Halley Mora, “Magdalena Servín”, “Mi querido doctor” y “eE hombre que
olvidaron”.
Como cuentista
es igualmente fecundo, siendo muy conocidas en ese aspecto dos de sus
producciones: “ No abandones ese surco” y “Muerte en el maizal”, premiadas en
concursos organizados por el Ateneo Paraguayo, entre los años 1953 y 1960,
respectivamente.
Rogelio
Silvero, de temperamento tímido y retraído, pese a su fecunda labor literaria,
nunca participó de los cenáculos literarios de nuestro medio, siendo así el
hombre más olvidado a la hora de citar los valores representativos de nuestras
letras.
Ello, sin
embargo, no es óbice para que por medio de sus libros pueda alguna vez romper
con su anonimato, siendo “Soplo telúrico” una apertura hacia tal objetivo, que
no podemos menos que saludar con mucha satisfacción.
Hoy destacamos
la faceta poética de Rogelio Silvero de su libro “SOPLO TELÚRICO”.
CIUDAD
DE ASUNCIÓN.
Ella
es la ciudad de mis sueños,
Yo
la comprendo,
Vibro
al conjuro de sus cantos,
La
idolatro y es mía
Como
el dulce beso de una madre¡
Cuan
grande es la envuelvo con mis pasos¡
Cuan
noble es la he sentido muy cerca
Desde
los días lejanos de mi tierna infancia;
Y la
llevo muy dentro,
Y
ella me tiene entre sus calles,
Al pie
de sus edificios
Encerrada
en lo recóndito de su alma
Que
es el alma de mi patria gloriosa¡
Aunque
a veces, tristemente en vano,
Desnudé
ante sus ojos mis largas congojas,
O le
abrí el corazón para mostrarle
Las
heridas de mis líricas esperanzas,
Igual
la quise siempre
Y
busqué la sombra de sus naranjales
Y el
aroma sutil de sus jardines.
Ella es
la ciudad de mis sueños.
La veo
elevarse. Ya no es la de antes,
Con
encajes y peinetas doradas,
Con
aleros bajos y aldabones en sus puertas,
Que
vieron nacer, crecer y esfumarse una época
Ya
arropada en los brazos de la historia.
Ahora
ella es otra,
Moderna
y pujante,
Con
sus altos edificios desafiando el cielo,
Creciente
y luminosa
En pos
de su futuro¡
(Asunción, 1953.) |

SOÑAR
VIVIENDO.
Llegué
hasta ti
Pisando
el polvo de un dorado camino
Y
descendí afiebrado para morder
Los
capullos de tus ósculos quemados.
Me
dolieron las mil punzadas
Que
sobre el corazón
Tejen
las palabras del odio;
Me
arrojaron a una turbulenta
Inmensidad
de pecados… pero, ay,
Los
ecos con sus uñas de tigres lejanos
Rompieron
muy cerca nuestro
Una
música de telas destruidas.
Éramos
entonces
Dos
ramas verdes muy desnudas
En
la torrencial hora solar;
Dos angustias
rompiéndose los labios
En
el interludio azul de vivir soñando.
(1951) |
ACOTACION DE FA-RE-MI: Rogelio Silvero nació en Caazapá,
el 14 de febrero de 1928, y falleció en Asunción, 28 de marzo de 2016. |
De izq.a der: Dr. Rubén Bareiro Saguier y Rogelio A. Silvero Rivero.
LA MUJER PARAGUAYA (x)
-Homenaje a su alma noble y activa-
Comenzaré cantando
la dulce estrella
que enciendes cuando ries
en todas las pupilas que te miran;
comenzaré por allí
porque allí nacen tus ojos y tus labios;
allí se colorean de rosa tus mejillas
y se abrillantan
la penumbra tierna de tus cabellos.
Cantaré tu gracia primero;
esa gracia que como una música
te envuelve
y ha llenado tu piel
con una frescura de tul
que sube de la tierra
de los largos horizontes
y de la selva…
Y así,
porque empiezo cantando
al azúcar perenne e intacto
de tus labios
saldrán estas estrofas
Con las alas de tu alma
para buscar el aliento de la brisa
por los caminos del recuerdo,
para volar como una nota
musical,
para que las sahumen de auroras
la constante primavera de los sueños.
Ahora que pienso
con mis ojos hundidos en tu corazón
yo quiero tu alma en tu corazón;
tu alma de mujer,
de madre,
y de heroína
alma que es luz en la tormenta
alba en la noche moribunda
beso en la hoguera
rosario abierto
en la triste tarde
de un angustia
esa tu alma yo quiero
en mis brazos
esa alma que es luz
que es canto, que es valor,
que es nobleza con su tenura de míes
y de noche llena de luna.
Después…
como un niño
o como un poeta que sufre
buscaré lo más dulce y puro
en lo profundo de tus grandes ojos;
allí donde abren sus corolas
candor de madre
caricias de novia,
y de donde salen las luces
que me inspiran
y refrescan el pecho.
Mujer Paraguay;
así te conozco
y así te siento..!
Así proclamo
y venero tu nombre
tan sencillo y tan alto;
Así te hallarán en los surcos;
y bajo el techo de los hogares;
en la ciudad
y en el campo
en la hora del sol
y de las flores….-
ROGELIO A. SILVERO RIVERO |
(x) Primer Premio del concurso poético sobre el tema "La Mujer Paraguaya", auspiciado por la Revista Artística Paraguaya FA-RE-MI, en el mes de se Septiembre de 1956 y publicado en el Nro.12 (Octubre 1956) Los miembros del Jurado, fueron: Josefina Plá, Lic. Mariano Morínigo y el Dr. Rubén Bareiro Saguier. El premio consistió en un pergamino.

Opiniones: “
ROGELIO SILVERO, es un poeta de lenguaje sencillo pero ardiente como advenido
de alguna bocanada estival de nuestra tierra, de rigurosa aspereza vegetal. De
esta manera, parece que aspirara a convencernos que la poesía no es más que la
exaltación de la emoción humana, en sus más variados matices, hacia zonas de
perennidad y elocuencia”.(del escritor y poeta Luís María Martínez)

|